Es frecuente que a los invitados les sorprenda lo protocolario o estructurado de las reuniones. Hay muchos motivos para hacerlo así. La comunicación profesional requiere un ambiente profesional, distendido pero retador al mismo tiempo. Nos llevamos muy bien y las reuniones son divertidas, pero no perdemos esa perspectiva. Si fueran reuniones de colegueo esa esencia desaparecería.
Aplaudimos todo el tiempo
La clave de la reunión es mantener un nivel de energía lo más alto posible. Aplaudiendo cada intervención y las salidas al escenario ayudamos a la persona que va a intervenir a hacerlo con más fuerza y energía. No te preocupes, al principio a todos nos parece raro, enseguida lo que te parecerá raro será no aplaudir.
Nos damos la mano al salir al escenario
El escenario es el lugar más importante en Toastmasters. Siempre debe estar ocupado y en cada cambio de intervención cedemos el lugar y la palabra estrechando la mano a la persona que pasa a ocuparlo. Empodera a la persona que a partir de ese momento tiene la palabra.
Todo el mundo tiene un papel en la reunión
- Toastmaster: conduce la reunión e introduce las diferentes partes. Prepara y dirige la sesión.
- Oradores: en cada reunión tenemos un mínimo de dos discursos preparados de entre 5 y 7 minutos.
- Evaluadores: uno por cada orador. Evalúa el desempeño en los discursos.
- Contador de muletillas: su tarea consiste en contar y anotar las muletillas más frecuentes, como ehh, ahh, bueno…
- Asistente de gramática: supervisa el buen uso del lenguaje y propone una palabra del día para ser usada durante la reunión.
- Maestro de la improvisación: sugiere una dinámica, en la que todos pueden participar, para hacer discursos improvisados de entre 1 y 2 minutos.
- Maestro de la escucha: al final de la sesión hace preguntas para comprobar cuánto de atentos han estado los asistentes tanto a los discursos como las improvisaciones.
- Cronometrador: su tarea consiste en medir el tiempo de cada intervención y mostrar una cartulina que ayude a controlar el tiempo de oradores y evaluadores.
- Evaluador general: hace un balance general tanto de la sesión como de sus preparativos y sugiere posibles puntos de mejora.
Si has tenido la oportunidad de asistir a una de nuestras reuniones, te agradecemos que dejes una valoración y un comentario de tu experiencia.